miércoles, 21 de marzo de 2007

Las alegrías de la guerra
Liberado el periodista Daniele Mastrogiacomo en Afganistán

Gorka Larrabeiti

Después de 15 días de secuestro han liberado al periodista de La Repubblica Daniele Mastrogiacomo. A cambio el mulá Dadullah ha conseguido que liberen a cinco talibanes: Ustad Yasir (Jefe del área cultural de los talibanes), Mufti Latifullah Hakimi (antiguo portavoz), Mansur Ahmad (hermano de Dadullah) y a dos comandantes Hafiz Hamdullah and Abdul Ghaffar [i] . La agencia Afghan Islamic Press afirma que Italia donará seis millones de euros para la reforma de la justicia [ii] . A Sayed Agha, chófer de Mastrogiacomo, lo degollaron anteayer, en presencia de Mastrogiacomo, porque, según el comandante talibán Ibrahim Hanifi, “se había comprobado que era un espía de las fuerzas militares extranjeras” [iii] . Sin noticias ciertas sobre el paradero del intérprete del periodista italiano, concluye un secuestro de dos semanas. Pero la guerra global permenente continúa. No hay fecha prevista para el fin de la operación Aquiles, la mayor ofensiva OTAN en Afganistán, entre cuyos fines estratégicos el coronel Tom Collins, portavoz de ISAF, menciona la construcción de la presa Kayaki en el río Helmand [iv] .

Han liberado a Mastrogiacomo pero no quedan periodistas in situ para informar de las bajas que está produciendo esta operación. Llega información directa gracias a los hospitales de Emergency [v] , que reciben heridos de toda condición; a través de la agencia Pajhwok (Noticias de ayer: coche bomba en Balj, siete prisioneros liberados de Bagram, mueren en una avalancha 16 personas en dos provincias occidentales, las inundaciones arrasan cientos de casas en Helmand, dos policías muertos en ataque en Farah, un funcionario gubernamental asesinado en Herat) así como del mando ISAF, que no informa de víctimas civiles sino sólo de aquellas ISAF [vi] .

La última crónica Mastrogiacomo la envió desde Kandahar: se trataba de un terrible parte de guerra en que informaba sobre las protestas populares que había levantado por todo el país la matanza de Jalalabad (16 civiles, 24 heridos). Tras un coche bomba conducido por un kamikaze que explotó antes de alcanzar su objetivo, lo que los estadounidenses definían como “una compleja emboscada”, el portavoz del gobierno afgano lo narraba así: “ Han disparado a lo loco. Ha sido una reacción desmedida”. En esa misma crónica, Mastrogiacomo recogía voces de campesinos y pastores que hablaban de “decenas de víctimas” civiles como consecuencia de bombardeos aéreos de la OTAN en el distrito de Sanguin.

Han liberado a Mastrogiacomo, pero no hemos visto lo que grabaron los periodistas de Associated Press en Jalalabad, pues los soldados les destruyeron todo el material. Tampoco hay imágenes de los 9 civiles muertos como consecuencia de un bombardeo OTAN al norte de Kabul [vii] .

Han liberado a Mastrogiacomo. Al día siguiente de la matanza de civiles registrada por Mastrogiacomo, la UNAMA (Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán) llamó “a mantener la calma a la población civil” [viii] .

Secuestraron a Mastrogiacomo en una zona de cultivo de opio, única fuente de vida para una población que no tolerará que arranquen las plantas de opio: “Para la gente de aquí el opio no es el diablo, el mal, sino el único bien, la única fuente de supervivencia [...] Defenderemos a costa de la vida los campos. Total: si nos quitan también esto, moriremos igual, ¡sólo que de hambre!” [ix] .

Han liberado a Mastrogiacomo pero sobre Afganistán no se negocia. El primero de los doce puntos “no negociables” que hizo públicos Prodi tras la crisis de gobierno dice: “Respeto a los compromisos internacionales y de paz. Apoyo constante a las iniciativas de política exterior y de defensa estableciadas en ámbito ONU y a nuestros compromisos internacionales derivados de nuestra pertenencia a la Unión Europea y a la Alianza Atlántca, con referencia también a nuestro compromiso actual en la misión en Afganistán” [x] .

Han liberado a Mastrogiacomo. La agencia Afgha informa de que en la provincia de Farah, colindante al sur con la de Herat, destino de 1600 soldados ISAF italianos y españoles, se intensifican las emboscadas, atentados y asesinatos [xi] . Durante la primera semana de secuestro de Mastrogiacomo, el número de salidas de la aviación estadounidense en Afganistán (330) ha superado al de Irak (327).

El suspiro de alivio por la liberación de Mastrogiacomo se corta al saber que en Afganistán se cuentan 722 muertos desde el inicio de 2007, de los cuales 223 son civiles, 349 talibanes o presuntos tales, 128 militares afganos y 22 soldados OTAN [xii] . Han liberado a Mastrogiacomo, pero ya se sabe: en guerra, las alegrías duran poco.



No hay comentarios: